Hotel Insotel Fenicia Prestige – Santa Eulalia – Ibiza

Ibiza no destaca por tener una buena oferta de hoteles de lujo. Sin embargo, el hotel del que vamos a hablar en este artículo cuenta con categoría de cinco estrellas y se encuentra situado en Santa Eulalia del Río. Los más conocidos de la isla de cinco estrellas son el clásico Hotel Hacienda Na Ximena (ver post aquí), el moderno Ibiza Gran Hotel y el recién inaugurado Hotel Hospes Aguas de Ibiza. Pero seguro que no son los únicos dignos de destacar y pronto prepararemos un artículo genérico de la isla que incluirá los que nos parecen los mejores.

El Insotel Fenicia se encuentra situado a pocos pasos de la playa Riomar que está unida a través de un agradable paseo de 15 minutos con la playa del centro del municipio, la playa de Santa Eulalia. Tiene ese nombre porque está situada junto al río. Es más, mucha gente la llama la playa del río de Santa Eulalia. Desde luego no es la playa más bonita de la isla pero está bien cuidada. Cuenta con bastante anchura y llega a los 300 metros de largo. Ofrece arena fina, de color blanquecino aunque en la zona de la orilla del mar hay demasiadas piedras y está  un poco sucia. En la zona más cercana al hotel hay hamacas para poder alquilar así como una completa oferta de deportes náuticos: moto acuática durante 15 mins 45 euros/1 persona y 50 euros/2 personas. También hay alquiler de pedalos, rulos, etc. Incluso hay algún chiringuito. El paseo desde el hotel hasta la playa, atravesando el río son 5 minutos, aproximadamente.

El lugar donde se ubica el hotel se conoce como urbanización La Siesta y es una zona residencial situada a poco menos de 5 minutos en coche del centro de Santa Eulalia pero dando un poco de rodeo. Es decir, para llegar al centro del municipio, dos opciones, paseíto de 15 minutos por la playa o 5 minutos de coche (en taxi, unos 7 euros).

La primera sensación del hotel es la de un edificio moderno, con buena pinta aunque la calle por la que se accede a la recepción es diminuta y se forman bastantes líos de tráfico. El pequeño parking exterior que hay detrás no libera el suficiente tráfico y se forma en la zona una especie de saco de fondo.

El hotel pertenece a la cadena Insotel, que también cuenta con otro hotel de similar corte en la isla de Menorca. La zona de vestíbulo en la entrada es amplia y cuenta con diferentes sillones y zonas de descanso. Si seguimos todo recto nos encontramos con una amplia terraza desde la que se puede ver todas las instalaciones que ofrece. La recepción propiamente dicha se encuentra a mano izquierda y resulta bastante pequeña para un hotel de esta categoría.

Nuestra llegada al hotel fue algo decepcionante. Nos fueron a buscar en un transfer conducido por personal del propio hotel. El chofer era amable pero no sabía prácticamente nada de la isla ni del hotel. El coche era amplio tal y como habíamos solicitado (Mercedes Vito) pero el coste de 88 euros lo hace totalmente desaconsejable e innecesario. Lo primero que nos piden en la recepción fue una tarjeta de crédito para gastos extras (normal y habitual hoy en día en casi todos los hoteles) y se la dejamos sin problema pero la sorpresa fue cuando nos ponen un talón en blanco para que firmemos debajo y ellos rellenan el importe en el momento del chek-out. Nadie piensa que van a cobrar más de lo consumido pero son detalles que deberían evitar porque no se hacen en casi ningún sitio y siempre generan una cierta desconfianza. Lo cierto es que si hubieran sido amables y nos hubieran atendido correctamente habría podido quedar en un mero conflicto pero no nos proporcionaron ningún valor añadido, es decir, ni comentarios de las instalaciones ni consejos ni horarios ni comentar los diferentes tipos de restaurantes, o incluso ni tan siquiera una leve mención al magnífico SPA del hotel.

El hotel es grande, con 172 habitaciones modernas que se clasifican en cuatro tipos según su tamaño. Las más pequeñas se llaman Fenicia Deluxe y las anuncian con 35 m2; las Junior Suite de 49 m2; luego están las Prestige Junior Suite, con 80 m2; y finalmente, las Family Suites, con dos habitaciones independientes y 92 m2. Nosotros estuvimos alojados en dos habitaciones comunicadas entre sí llamadas Family Junior Suite que no son otras cosa que dos Junior Suite normales pero comunicadas entre sí. Para nosotros era fundamental que estuvieran comunicadas ya que viajábamos con niños y no nos dieron otra opción en el hotel, es decir, no existen habitaciones normales comunicadas lo que implica un serio incremento de coste. Además, nos cuesta aceptar que llegaran a tener los casi 50 m2 que anuncian porque nos parecieron bastante más pequeñas. A continuación os mostramos un vídeo de la habitación que ocupamos:

Del resto de la habitación destacan la terraza y los baños, que cuentan con ducha y bañera separada pero tampoco sin ninguna maravilla. La televisión es de marca Sony pero está demasiado alejada de la cama y para verla es necesario ubicarse en un sofá que no resultaba nada cómodo. Sin embargo, la cama con los grandes almohadones ofrecía una gran comodidad. La otra pega que encontramos fue con el suelo de madera (o imitación) ya que necesitaba una reforma urgente. Suponemos que la humedad ha provocado que se formen vacíos y crujía constantemente lo que ocasionaba unas melodías un tanto desagradables.

Resumiendo, no se puede decir que las Junior Suite globalmente fueran malas pero sí podemos afirmar que rozan los mínimos exigidos para un hotel de cinco estrellas. Además, los pequeños fallos que nos iban sucediendo unidos al elevado coste que implican en temporada alta, provoca que las desaconsejemos totalmente.

Los servicios de restauración incluyen un restaurante oriental, un restaurante gourmet llamado Vinoteca y otro situado al fondo y llamado Tanit, junto a la piscina que ofrece un ambiente más informal. Junto a este último se encuentra uno más sencillo tipo snack bar para poder tomar alguna ración, pasta o diferentes sandwiches. De todos los comentados sólo probamos el último y tampoco nos pareció nada del otro mundo. Sin embargo, el buffet de desayuno nos pareció francamente bueno y muy completo, con un servicio agradable y ejemplar que nada tiene que ver con el resto del personal del hotel (son cosas curiosas pero así fue durante toda nuestra estancia). A continuación os ofrecemos un video del buffet de desayuno:

Se echa de menos un buffet de cena o un restaurante de corte similar ya que las familias con niños lo tienen complicado para encontrar un sitio aconsejable. También se puede picar algo en la zona de la biblioteca, al lado de la recepción o en el room-service pero nuestra experiencia tampoco lo hace aconsejable. A continuación os ofrecemos un video de la entrada al hotel y la zona de la recepción:

Lo que más nos gustó del hotel fue el SPA.Cuenta con tres zonas: una exterior con un gran jacuzzi en una piscina con todo tipo de chorros y otro jacuzzi pequeño; una zona interior de aguas con jacuzzi para tumbarte al estilo de las famosas camas de agua, y luego, una gran piscina con diferentes tipos de chorro y cascadas, posibilidad de nadar contra corriente y una especie de sillones de chorros que hacen las veces de los mismos sin tomar asiento: la tercera y última zona tiene una sauna, laconium y tepidarium (similares a los baños turcos a diferentes temperaturas), zona de cambios de temperatura con hielo, dos duchas de sensaciones, tipo de nebulosa y una zona de relax con cuatro sillones un tanto incómodos y unas camas de agua que no aportan mucho.

Solo se echa de menos una zona de relax con algún lugar para tomar una infusión y similares. Además ofrece un buen menú de tratamientos con varios tipos de masajes. El punto negativo del SPA es que no es realmente del hotel y puede usarlo cualquiera previo pago de la tarifa. No hay descuentos por ser del hotel salvo si se hacen programas-tipo (además de un 2×1 que había entre semana durante nuestra visita). El gorro es obligatorio para la piscina y proporcionan toallas y zapatillas para uso desechable. No hemos dicho todavía que el coste normal por acceder al SPA es de 30 euros, algo que se nos antoja ofensivo en cualquier hotel de lujo, independientemente del importe.

Respecto al menú de tratamientos y masajes tiene buena pinta pero no podemos opinar de la calidad de sus masajes ya que nada más llegar, intentamos reservar algún masaje pero nos confirmaron que no tenían ni un hueco en toda nuestra estancia. En cualquier caso, para todo el que quiera probarlos, que lo reserve desde el mismo momento que contrate sus vacaciones para evitar problemas. El coste de los tratamientos y/o masajes es bastante coherente para el tipo de hotel que es ya que oscilan alrededor de los 60 euros por 60 minutos de tratamiento. Básicamente hay masajes relajantes y terapéuticos, baños de hidroterapia así como tratamientos corporales de baños y envolturas. Además tienen un gabinete de estética facial y corporal.

Como otras instalaciones, destacan las diferentes piscinas exteriores, una de ellas, la más grande es muy bonita y ofrece una zona de chorros complementaria, al estilo del SPA interior. Luego cuenta también con una piscina para niños que parece un baño caliente porque esta a 38 grados, algo que resulta un poco desagradable. Es muy importante tener cuidado con el suelo de toda la zona de las piscinas ya que, con pies mojados, resbala mucho. Mejor ir por el borde de las piscinas para evitar riesgos. A continuación os ofrecemos un video de la zona exterior con las piscinas como protagonistas principales:

También cuenta con un club de niños con unas mesas dentro y otras en una especie de pequeña terraza semi-cubierta junto a una pequeña casita. Pero en nuestra estancia no apareció por allí ni un solo niño. Desde luego, no es un buen hotel para planes con niños.

Uno de las aspectos del hotel que más nos decepcionó fue el personal que forma su plantilla. En su mayoría, no son buenos profesionales y el número no parece suficiente para atender a la clientela. En general, es bastante deficiente y no parece que sea por la cualidad humana de las personas sino por la formación de la misma en la cultura del Hotel. Siempre hay excepciones ya que, por poner un ejemplo, Raquel en el buffet de desayuno o las personas que llevan el SPA se esforzaban constantemente por ayudar y eran buenas profesionales. Quizás, lo peor fue el tema de conserjería ya que casi nunca había nadie para echar una mano con los taxis ni con los bultos y/o maletas.

En cuanto al precio, es elevado y en nuestra única visita constatamos la mala relación calidad/precio. Los precios de las habitaciones normales se sitúan alrededor de los 250 euros/noche en temporada alta y las obligatorias Junior Suite si se quieren tener habitaciones comunicadas ascienden a 370 euros/noche. La reserva se puede efectuar a través de la web del Hotel donde se puede ver rápidamente las diferentes posibilidades de precio y tipo de habitaciones.

Hemos subido muchas fotos del Hotel aquí, nuestro mural de Rincones Secretos en Flickr. Si no es fácil de encontrar os recomendamos que visitéis nuestras galerías personales en Flickr (monthypm -aquí- y marylebone -aquí-) ya que está toda la información mejor organizada por carpetas. La carpeta del Hotel Insotel Fenicia Prestige está aquí.

Valoración – 4/10

Hotel Insotel Fenicia Prestige – *****
Dirección: Calle Narcisos, s/n – Urbanización Siesta – 07840 Santa Eulalia del Río – Ibiza
Teléfono: 971 80 70 00
Web: http://www.insotelhotelgroup.com/prestige/