Mijas – Málaga (España)
La verdad es que acabamos de pasar una Semana Santa totalmente pasada por agua en casi todos los sitios de España y nosotros hemos sufrido nuestra correspondiente ración en la costa malagueña. Debido a esto nos hemos animado a coger el coche y a hacer algunos kilómetros por esos pueblos situados un poco más al interior y que no dejan de ofrecer una alternativa interesante en las escapadas por estas tierras andaluzas.
Cuando hace unos meses publicábamos el artículo genérico de Marbella (ver post aquí), citábamos como una posible excursión la visita del pueblo de Mijas y así lo hemos hecho nosotros hace unos días. La verdad es que hacía tiempo que no íbamos y ha cambiado bastante poco en los últimos años. Mantiene la esencia de lo que fue y sigue siendo un lugar muy recomendable para pasar unas horas perdiéndose por sus estrechas calles, visitando sus pequeñas iglesias o capillas, viendo sus casas encaladas de color blanco que recuerdan su pasado árabe y perdiéndose por sus rincones más secretos.
Obviamente nos referimos anteriormente al centro histórico del pueblo de Mijas ya que la localidad es bastante grande en lo que se refiere a término municipal y en toda ella se puede encontrar un poco de todo. Se encuentra localizada entre los términos municipales de Fuengirola y Marbella y su costa llega a tener más de 10 Km de extensión aunque no se caracteriza por sus buenas playas. Cuenta con varios campos de golf tales como el Chaparral, Los Olivos, Los Lagos, La Cala, Santana, La Siesta, Calanova, La Noria, Cerrado del Águila y alguno que se nos olvidará. También tiene un Hipódromo, un Parque Acuático y una importante oferta hotelera entre la que se echa de menos el añorado Hotel Byblos que tuvo que cerrar sus puertas el año pasado.
Visitar el centro histórico caminando es muy agradable y merece la pena comenzar el recorrido por un pequeño paseo en sus simpáticos burros-taxi. Es cierto que es un poco turistada pero si vais con niños les hará mucha gracia y si no vais con niños imaginad que lo sois y listo. El paseo puede realizarse encima del burro o en una especie de carro donde caben 2 personas. En el primer caso el coste es de 10 euros los 15 minutos y en el segundo caso cuesta 15 euros. Se cogen justo a la salida del aparcamiento del pueblo donde os recomendamos que dejéis el coche.
Después de los burros, lo mejor es ir subiendo poco a poco por el pueblo comenzando por la Plaza Virgen de la Peña, siguiendo por la Iglesia de la Concepción y llegando a la Plaza de la Constitución donde están algunas de las mejores opciones gastronómicas del pueblo. Un poco más arriba se encuentra su famosa Plaza de toros que permite acceder a la zona de la Muralla donde se pueden disfrutar de unas vistas espectaculares del valle y de toda la extensión del municipio. También merece la pena complementar la visita con la Ermita de la Virgen de la Peña del siglo XVII y, por supuesto, hay que ver su afamado Museo de Miniaturas llamado Carromato de Max.
En cuanto a restaurantes recomendados hay varios que merece la pena mencionar. Nosotros acabamos de subir un artículo del Restaurante La Alcazaba (ver post aquí) en el que hemos almorzado en nuestra reciente visita y que nos ha gustado mucho tanto por su cocina como por el servicio y sus magníficas vistas del valle. Luego, otras opciones a tener en cuenta podrían ser El Mirlo Blanco, El Capricho y El Olivar.
Multimedia
Fotos
Todas las fotos, junto con las que hicimos de este lugar, se pueden ver aquí, en nuestro mural de Rincones Secretos en Flickr. Si no es fácil encontrar la información os recomendamos que visitéis nuestras galerías personales en Flickr (naialor –aquí-, monthy –aquí- y marylebone – aquí-) ya que está toda la información mejor organizada por carpetas. En cualquier caso, aquí está el álbum de Mijas.
Acceso a fotografías
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