Iguazú – Argentina
Iguazú
Las cataratas de Iguazú están formadas por 275 saltos de agua que llegan a tener más de 50 metros de altura. Realmente, estamos hablando de la expresión más auténtica de la naturaleza en sí misma. Es algo realmente espectacular. Es un viaje único, de esos lugares que todo el mundo debería ver, al menos, una vez en la vida.
Para poderlas visitar en toda su plenitud, os recomiendo dormir en el lado argentino ya que hay muchas más rutas para recorrer llenas de pasarelas muy bien comunicadas entre sí. La más espectacular de todas se llama Garganta del Diablo. Estar frente a este salto de agua es algo único e imposible de olvidar. También, se dice que el lado brasileño no merece la pena y yo no estoy de acuerdo. Es cierto, que si tuviera que elegir, la vertiente argentina es mucho mejor, pero la ventaja de lado brasileño es que tienes unas vistas muy bonitas de todo el lado argentino. Además, desde un prisma más alto por lo que la idea de todo el Parque Natural la captas mucho mejor.
En el sector argentino de las pasarelas es frecuente encontrar grupos de coatíes, que es un animal muy gracioso y muy confiado que te pide comida constantemente. Es parecido a un gato, con uñas muy largas y, aunque no es peligroso, hay que andarse con mucho ojo porque intenta quitarnos la comida constantemente. También es frecuente ver tucanes ya que hay cinco especies presentes en el Parque. Para los amantes de la fauna, hay multitud de mariposas, lagartijas, insectos (comprar Spray anti-mosquitos) y un sinfín de clases de pajaritos.
En muchas agencias recomiendan ir una semana o, como mínimo, tres noches y yo os aseguro que, con dos noches, es suficiente. El lado argentino lleva un día completo, el brasileño, una mañana y el resto podemos dedicarlo a conocer las ciudades de Iguazú o Foz de Iguazú pero tampoco pasa nada si no las vemos. En ese tiempo, yo cogí los barcos en los que, literalmente, te empapas, hice una excursión muy graciosa en el tren de la Selva, visité los saltos de agua más importantes y encima pude descansar bastante en el hotel. La idea es madrugar un poco y perder poco tiempo en comer.
Otra excursión corta, cara y espectacular es la vista aérea desde el helicóptero. No la veo básica ya que, si tenemos la suerte de llegar de día y con el tiempo favorable, todos los aviones sobrevuelan la zona y la vista es parecida y gratuita (relativamente -:)). Eso sí, no olvidéis solicitar ventanilla en el aeropuerto de origen.
En cuanto a hoteles, yo me alojé en el Sheraton que cumple perfectamente con los estándares de la Cadena. Es algo caro pero la situación que tiene, nos obliga a asumir su coste.
También está la opción de ir a un gran hotel llamado Iguazú Grand Hotel Resort & Casino. Yo no fui por la situación pero es bueno recordar que este hotel pertenece a la cadena LHW y ya sabemos lo que eso implica. Además, cuenta con Casino y habrá gente que lo valorará.
Respecto a la mejor época para ir es difícil recomendar. Lo importante es tener mucha suerte con el tiempo ya que con niebla es una pena verlo. La lluvia molesta pero no impide disfrutar del lugar pero la niebla puede cambiarlo todo. El clima es tropical por lo que todo el año la temperatura es bastante estable y elevada, en torno a los 20º/30º. Quizás la mejor época es en los meses de verano español incluido octubre ya que es cuando menos calor hace allí. En cualquier caso, hay que tener presente que la lluvia es muy frecuente en Iguazú. Precisamente, es uno de los motivos por los que la naturaleza ha creado este paraíso.