Restaurante Las Reses – Madrid

Vista exterior

Vista exterior

Cada vez que comento con mis padres que voy a cenar en Las Reses, me responden: a ese restaurante íbamos de novios. Este restaurante, que lleva abierto desde mediados de los 60, es un interesante lugar que conocer en Madrid.

Algunos detalles de la carta, su horario, que cierra los sábados y demás que comentaremos, crean un curioso lugar donde pasar una agradable velada

Salón principal

Salón principal

Localización

Puede ser una de las calles más cortas y a la vez céntricas de Madrid. En medio de la locura urbana entre Alonso Martínez, Colón y Génova, se encuentra la Calle Orfila. Es conocida porque justo en frente de Las Reses, se haya un hotel de un montón de estrellas tocayo de la calle.

Aparcar es complicado, pues en la misma calle o se puede ni parar. Hay que dejar el coche justo en la perpendicular como podamos, o en la misma puerta si en ese momento se encuentra el aparcacoches. Dejemos donde lo dejemos, la persona es hiper amable y no debemos preocuparnos demasiado por nuestro vehículo. La dirección del lugar es:

Calle de Orfila, 3
28010 Madrid
91 308 03 82

Ambiente

A la entrada nos aguarda un hall bastante grande, con una barra que siempre he visto deshabitada. A la derecha, tenemos la entrada a un comedor diáfano que debe usarse para ciertos eventos como comuniones.

En frente ala izquierda, unas escaleras nos llevan a a la zona de abajo, donde no todas las compañías tienen cobertura, algo muy de agradecer a veces. Ahí nos encontramos con una barra bien repleta de todo lo que se puede beber, y dos comedores, separados por un pasillo donde se encuentra dicha barra, y en frente la cocina.

Detalle de mesa

Detalle de mesa

La decoración es muy agradable, con suelos de madera, y tonos cálidos, tirando a rojos en las paredes. Las mesas tienen una separación correcta y se hacen bastante cómodas ya que no son estrechas.

La luz es clara, pero muy agradable, no molesta. Lo cierto es que no se bien como describirlo, pero el ambiente es claro y a la vez acogedor.

El comedor que se encuentra justo en frente según bajamos las escaleras a mi gusto es más agradable al que se encuentra justo detrás.

Carta

De entre todos los entrantes, tengo que destacar sin lugar a dudas los dos siguientes: los pimientitos rellenos de mozarella y las morillas.

Los primeros son unos pimientitos rojos enanos, rellenos del nombrado queso, bañados en una escueta salsa transparente que no se bien que es, pero que ayuda a conformar un plato exquisito.

Las segundas son unas setitas, en forma de campanillas, preparadas con una salsa de su mismo color. Este plato sin duda es algo espectacular.

Morillas

Morillas

Los demás entrantes, mas típicos pero de muy buena calidad, ensaladas de tomate con ventresca, huevos rotos,…

Huevos estrellados con patatas

Huevos estrellados con patatas

De segundo, hombre pescado tienen pero llamándose Las Reses, nunca nos hemos atrevido. El villagodio es de buena calidad, algún entrecot contundente acompañado de foie, o incluso el steak tartare apuntan muy buenas maneras.

Villagodio de vaca gallega

Villagodio de vaca gallega

Steak Tartar

Steak Tartar

De postre, atractivo carrito que nos acercan tras cenar, de donde me quedo sin duda con la tarta de queso. Podemos consultar la carta aquí

Tarta de chocolate

Tarta de chocolate

Nuestra experiencia

La cena trascurre de manera bastante fluida, quizá demasiado rápido a veces ya que entiendo que la mayoría de los platos están preparados de antemano. En cualquier caso, el siempre amable y atento servicio, el ambiente y la exquisitez de la comida, hacen que la velada sea placentera.

Lo cierto es que Las Reses es un lugar muy elegante, donde perfectamente podemos ir a cenar con amigos, organizar una cena de trabajo o incluso ir en pareja. A veces es difícil casar restaurantes con este tipo de cocina con cenas románticas por ejemplo, pero aquí si que podemos.

Vista de la barra desde el salón principal

Vista de la barra desde el salón principal

Bodega

Como es perfectamente entendible y  ya hemos comentado en algún otro artículo, un restaurante con una rotación limitada no puede permitirse el tener  una carta de vinos excesivamente extensa.

El problema de una carta poco arriesgada, es que suele ser cara, con los vinos fantásticos por supuesto, pero de siempre.

Recuerdo que las últimas veces que hemos cenado, nos hemos decidido por algún Arzuaga y vinos parecidos.  Pido disculpas si se me escapa el detalle de alguna propuesta más innovadora.

Salón principal

Salón principal

Precio

Jamás he conseguido bajar la cuenta de los 85 € – 90 € por persona. Sin duda, es debido a que la cruz de los fabulosos entrantes que he descrito al principio, es su precio. Las morillas no bajan de los 20 y los pimientos se acercan por abajo.

Si a esto le sumamos algún entrante más, el vino, el segundo y la copa, llegamos fácilmente a la cifra exacta.

Por otro lado, sabiendo a lo que voy, es un restaurante en el que me gusta repetir. Para mi, sí que merece la pena de vez en cuando pasar por la experiencia de Las Reses.

Conclusión

Aperitivo, cena y sobremesa agradable. Un servicio muy profesional y una comida de sobresaliente. Desconozco la situación personal de los dueños, pero si cerrar los sábados responde a un volumen de comensales bajo, como parece, no lo puedo entender.

Me repito como en Pedralbes, hay restaurantes más “Fashion”, llenos hasta la bandera, y otros como estos dos últimos, que inexplicablemente no tienen lista de espera, las modas?

Comentarios

2 Respuestas to “Restaurante Las Reses – Madrid”
  1. Borja dice:

    El sitio ha perdido muchisimo. Hace 10 años era una referencia de la carne en Madrid, sobre todo su stick tartar, pero ahora se como mal y caro. Creo que el cocinero jefe se fue y desde ntonces decayo la calidad de la cocina.
    Hay mejores alternativas en MAdrid

  2. Isabel dice:

    Como casi siempre, para gustos, los colores. Conozco el establecimiento desde casi 20 años y creo que sigue siendo una referencia de la carne en Madrid, me atrevería a decir, que no sólo de la carne, sino de la materia prima que trabajan, en general.
    Como todo, hay cosas que te gustan más y otras menos, pero en cuanto a calidad, no he podido poner nunca objeción alguna a ningún plato.
    Apuntar por otra parte la contundencia de las raciones.
    Relación calidad-precio, buena, así como el servicio también lo es.