Suquet de l’Almirall – Barcelona (España)

La zona de La Barceloneta pasa por ser una de las áreas más prodigas en restaurantes de Barcelona. Frecuentada por turistas y barceloneses particularmente el fin de semana, su oferta fundamental se centra en restaurantes de pescados, mariscos y arroces. El Suquet de l’Almirall es un clásico de la zona, un restaurante familiar enfocado a una cocina marinera con toques modernos e innovadores. Buenos pescados y maricos y mejores arroces y paellas son lo más destacable de un restaurante que cuenta con zona de terraza y hasta 2 comedores privados a modo de reservados. De precio medio-alto la clientela es una mezcla entre locales y turistas, eso sí, bien informados.

Localización de Suquet de l’Almirall

Frente a la marina y en un paseo repleto de restaurantes con oferta de idéntica cocina, el Suquet destaca por su zona de terraza y los colores azules y blancos de su exterior. Su dirección exacta es:

Dirección: Passeig Don Joan Borbó, 65; 08003 Barcelona (España)

Teléfono: + 34 932 216 233

Web: http://www.suquetdelalmirall.com/index_en.html

Ambiente de Suquet de l’Almirall

El Suquet, localizado en el mismo emplazamiento que unos extintos astilleros, se ubica en un local de 2 plantas, con una terraza en el frente. Empezando desde fuera diremos que la terraza es lo primero que uno percibe, siendo uno de los alicientes del restaurante.

En el interior, 2 son las plantas que cuentan con comedores: una a ras de suelo, la otra en el piso inferior.

La planta baja, ubicación de la bodega, dispone de 2 reservados, los cuales se pueden unir en un único espacio común, con capacidad para unas 40 personas.

La decoración del Suquet es predominantemente marinera, con cartas náuticas, cuadros con motivos relativos a la mar y a la zona de la Barceloneta – ubicación del restaurante – o fotografías de visitantes ilustres, entre otros.

La clientela es variada, combinando locales y turistas si bien nos pareció de un perfil medio-alto, muy distinta a la de otros restaurantes de la misma zona de la ciudad.

Los horarios son bastante convenientes, pudiendo comer y cenar hasta bastante tarde, algo bastante inusual en la Ciudad Condal.

Carta de Suquet de l’Almirall

Quim Marqués ha sabido conservar la tradición familiar pero a la vez introducir un punto de innovación en la cocina marinera que siempre ha caracterizado al Suquet. Los productos de la mar y los arroces son los verdaderos protagonistas de la carta, una carta que ofrece distintas opciones, incluyendo un menú degustación así como un pica-pica marinero, menú ciego de 7 tapas concluido por un arroz o fideuá.

Volviendo a la misma diremos que de los distintos bloques de los que se compone destacan los entrantes para picar, selección de tapas variadas, así como los arroces y fideuás.

Adicionalmente distintos primeros platos y pescados son otras de las opciones, a las cuales se une algún que otro plato a base de carne.

El hecho de que las opciones para picar sean fácilmente compartibles ayuda a que la elección más recomendable sea la de escoger distintos platos y finalizar con un arroz o pescado.

De las tapas hablaremos posteriormente ya que en nuestra visita al Suquet probamos la mayor parte de las mismas. Del resto de la carta decir que en los arroces destacaríamos fundamentalmente el “Arroz negro” y el Arroz de “senyoret” mientras que del resto de la misma quizás destacaríamos el “suquet”, guiso de pescados preparados con una salsa.

Hablando de pescado diremos que todos los pescados y mariscos son frescos, en directo de la cercana lonja con lo que conviene preguntar, de escoger algún pescado o marisco, que han recibido ese mismo día.

Para concluir diremos que la cocina es de temporada si bien el cambio de la carta es bianual.

Nuestra experiencia en Suquet de l’Almirall

Tratándose de una comida numerosa celebrada en la planta baja del Suquet, tenía sentido escoger una selección de tapas variadas y finalizar con un arroz, algo que ayudaría a acelerar los tiempos.

De dicha manera comenzamos con distintas de las especialidades del restaurante, en concreto los buñuelos de bacalao.

Continuamos con una ensalada de tomate y ventresca, igualmente destacable.

 Y seguimos con unos pimientos dulces con anchoas. Para acabar la selección inicial para compartir con unas croquetas de pollo y pernil.

El arroz venció como plato principal, igualmente pensado para ser compartido. Optamos por un Arroz negro, el cual venía acompañado por chipirones, si bien no nos pareció al nivel de lo esperado y, considerando la calidad de las tapas que habíamos probado previamente y, en particular, el precio que se paga por el mismo.

La verdad es que el hecho de haber sido un grupo numeroso de comensales condicionó nuestra elección. Otras muy buenas opciones incluyen el pulpo a la gallega, las espardeñas, las navajas o las gambas, alguno de los platos que uno puede compartir y todos ellos perfectamente elaborados y presentados.

Para terminar nuestra comida, el postre nonos defraudó, un postre a base de chocolate blanco y galleta.

Bodega de Suquet de l’Almirall

Situada en la planta baja del restaurante, el Suquet conserva una interesante colección de vinos. Sea dicho de paso que la mayoría – por no decir la totalidad – de las referencias son nacionales, con una preferencia por los vinos de la zona.

Sobremesa en Suquet de l’Almirall

En cualquier parte del restaurante la sobremesa es agradable, en particular en la terraza exterior y en cualquiera de los reservados del piso inferior.

Servicio de Suquet de l’Almirall

El servicio es atento y ayuda en la elección. El único pero es que a veces es un poco lento tomando nota y trayendo la comida, algo quizás normal en un restaurante de este estilo.

Precio

Los precios oscilan considerablemente en Suquet. Si bien un menú degustación se puede escoger por € 35 el menú – sin vino – la opción más fácil es la de escoger distintos entrantes y compartir un arroz. Sin vino pero con postre una comida o cena a la carta se sitúa en los €35-50 por persona.

Conclusión

No está quizás a la altura de otros restaurantes de pescados y arroces de la ciudad – sobre todo si uno considera el precio – pero sí nos pareció de lo mejorcito en este género en la zona de La Barceloneta, particularmente si el tiempo acompaña e incluso se puede aprovechar la terraza. Su carta rotatoria y su permanente oferta en pescados frescos del día, lo convierten con muchas posibilidades y que seguramente nunca canse…