Hotel Chateau Laurier – Ottawa – Canadá

Vista exterior del Hotel

Vista exterior del Hotel

El Chateau Laurier de Ottawa ha sido el lugar que hemos elegido para alojarnos en la ciudad dentro de nuestro reciente viaje por tierras canadienses. Tal y como su nombre indica, se trata de un castillo en toda regla diseñado a imitación de los castillos franceses que se pueden encontrar en la ribera del Loire. Su construcción data de los primeros años del s.XX siendo inaugurado por Sir Wilfred Laurier en 1912. Fue realizada por la Grand Trunk Railway (es decir, la empresa de ferrocarriles) que pretendía imitar la magia y el romanticismo de los viajes en los trenes de la época.

Se encuentra situado en el centro de la ciudad, rodeado de los Edificios del Parlamento y del Canal Rideau. La privilegiada situación que tiene permite realizar caminando la mayoría de las visitas turísticas de esta elegante ciudad, capital de Canadá. Ottawa es un punto de inflexión en el viaje de la costa este canadiense ya que separa la zona francesa de la zona inglesa siendo el lugar donde mejor conviven las dos identidades. Además, el bonito emplazamiento, al borde de los ríos Ottawa y Rideau permite que el visitante disfrute mucho de sus atracciones turísticas.

Vestíbulo del Hotel

Vestíbulo del Hotel

El Chateau Laurier es propiedad de la conocida cadena de hoteles de lujo llamada Fairmont que siempre nos recuerda al famoso hotel de San Francisco donde se rodó la película “Hotel”. Lo cierto es que la cadena cuenta con lujosos establecimientos en todo el país y este su único representante en la ciudad.

Recepción

Recepción

La primera imagen exterior que se percibe del hotel es muy impactante. A pesar de que ya habíamos visto innumerables fotos, la sensación es espectacular tanto por su construcción como por el lugar donde se encuentra. Nosotros llegamos en coche propio y, tal y como suele ser habitual en este tipo de hoteles, cuenta con el servicio llamado valet parking ($34/día) que es caro pero permite olvidarse totalmente del coche nada más llegar al hotel. Cuando llegas, te lo aparcan los conserjes y cuando lo necesitas sólo hay que avisar desde la habitación unos minutos antes de necesitarlo. Sin embargo, a pocos metros del hotel, en la calle Sussex Dr. hay otro parking mucho más económico y recomendamos utilizarlo.

Vestíbulo del Hotel

Vestíbulo del Hotel

La zona de vestíbulo en la entrada es clásica, con suelos de mármol y grandes alfombras en el suelo. Los antiguos sillones en tonos azules y rojos contrastan con las maderas claras de las paredes. Todo ello coronado por una clásica lámpara de época. La recepción propiamente dicha se encuentra a mano izquierda junto a la zona de conserjería mientras que en la derecha se encuentra el Zoe’s lounge que cuenta con piano bar e intenta representar una oferta más moderna de la que ofrece el resto del hotel.

Zoe’s lounge

Zoe’s lounge

Si atravesamos la zona de la recepción ya comentada, llegaríamos a un nuevo pasillo que conduce, por una parte, a mano izquierda, al restaurante del hotel y, por otra, a mano derecha, a los ascensores que llevan a las habitaciones.

Pasillos posteriores del Vestíbulo

Pasillos posteriores del Vestíbulo

El hotel es muy grande ya que cuenta con 429 habitaciones que se clasifican en cuatro tipos según su tamaño y las vistas que tenga. Las más sencillas se llaman Deluxe Room y Fairmont Room, donde también se puede elegir un servicio más exclusivo denominado Fairmont Gold; luego están las Junior Suite y las Corner Suite, de tamaño más amplio ya que cuentan con un pequeño salón; y finalmente, las Suites, con habitaciones independientes, bastante más amplias y muchos tipos diferentes que vienen bien explicados en la web original del hotel. Nosotros estuvimos alojados en una Fairmont View King de la que os mostramos un vídeo a continuación:

La habitación estaba situada en el segundo piso y se llega a ella después de atravesar un largo pasillo desde el ascensor. Esto es debido a que se encuentra en el ala más antigua del hotel, donde las habitaciones eran más pequeñas pero contaban con mejores vistas de los edificios del Parlamento. Sin embargo, después de realizar la reforma, se fueron convirtiendo dos de las antiguas habitaciones sencillas en una más grande y de ese tipo fue en la que nos alojamos. Tal y como habréis podido ver en el vídeo la habitación era bastante espaciosa pero tiene una forma algo extraña debido a la reforma ya comentada. Los muebles son bastante antiguos aunque cuenta con televisión a la que se le puede incorporar un teclado para navegar por internet. El suelo es de moqueta, la cama cómoda y cuenta con plancha de pantalones. Lo que menos nos gustó fue el baño, que cuentan con una bañera demasiado vieja al igual que el resto de utensilios. Aún así, lo peor es la mala insonorización ya que el ruido de las campanas del Parlamento no permite que nadie pueda conciliar el sueño de madrugada. Además, la calefacción suena demasiado.

Vistas del Parlamento desde la habitación Fairmont View King

Vistas del Parlamento desde la habitación Fairmont View King

Los servicios de restauración cuentan con un bonito restaurante llamado Wilfrid’s con vistas al Parlamento, un gran servicio y una espectacular Bodega. Muy pronto subiremos artículo al blog; otro más informal llamado La Terraza que sólo está abierto los meses de verano y el mencionado anteriormente Zoe’s lounge, donde hay un menú ligero. Nosotros tomamos el desayuno en la habitación y nos pareció francamente bueno, tanto en calidad como en cantidad y en relación calidad/precio. Nos quedamos con ganas de probar el Sunday Brunch del que nos habían hablado muy bien.

Restaurante Wilfrid’s

Restaurante Wilfrid’s

El hotel también cuenta con gimnasio (health club), una piscina interior climatizada de 20 metros y un pequeño centro de estética y masajes tipo SPA. Dentro de los vestuarios cuenta con sauna en cada uno de ellos. Evidentemente, entrar en él no tiene coste para los clientes del hotel.

Entre otras instalaciones, destaca la oferta de salones para reuniones así como la celebración de eventos de diverso tipo.

Zona de camas de la habitación

Zona de camas de la habitación

Una vez más, el personal que nos atendió en todos los rincones del hotel fue extremadamente amable. Desde el servicio de conserjería a los camareros del restaurante, todos nos atendieron de maravilla y es digno de agradecer.

Pasillos posteriores del Vestíbulo

Pasillos posteriores del Vestíbulo

En cuanto al precio, la habitación que elegimos salió por unos 180 euros/noche. Sin embargo, los precios de las habitaciones más sencillas se situaban alrededor de los 120 euros/noche lo que nos parece un magnífico precio para la calidad del hotel y la situación que tiene. Es más, quizás elegir la vista del Parlamento fue un error ya que el ruido de las campanas no permite un buen descanso por lo que recomendamos habitaciones más económicas aunque la vista sea peor. La reserva la hicimos a través de la web del Hotel donde se puede ver fácilmente las diferentes posibilidades de precio y tipo de habitaciones.

Vista exterior del Hotel junto al canal Rideau

Vista exterior del Hotel junto al canal Rideau

Hemos subido muchas fotos del Hotel aquí, nuestro mural de Rincones Secretos en Flickr. Si no es fácil de encontrar os recomendamos que visitéis nuestras galerías personales en Flickr (monthypm -aquí- y marylebone -aquí-) ya que está toda la información mejor organizada por carpetas. La carpeta del Chateau Laurier está aquí.

Valoración – 8/10

Hotel Chateau Laurier – *****
Dirección: 1 Rideau Street – Ottawa – Ontario – Canada K1N 8S7
Teléfono: (613) 241-1414
Web: http://www.fairmont.com/laurier

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  1. [...] donde nosotros nos alojamos y del que ya hemos subido un artículo completo en el siguiente link: Hotel Fairmont Chateau Laurier. Además sirve de separación entre ambas zonas y forma parte de la historia de la ciudad. El [...]