Restaurante Lounge Buda – Barcelona

Restaurante – Buda

Dirección: Pau Claris, 92 – 08010 – Barcelona

Teléfono: 93 318 42 52

Web: http://www.budarestaurante.com/

Se encuentra situado muy cerca de la intersección entre Paseo de Gracia y la Gran Vía, en pleno centro de la ciudad.

El restaurante, de cuidada decoración oriental, cuenta con dos partes claramente diferenciadas. Al cruzar la entrada, unas pequeñas escaleras nos conducen, mediante un largo pasillo, a la zona central del local. A mano derecha una larga barra y a mano izquierda diferentes mesas bajas destinadas a tomar un aperitivo antes de cenar o una copa tras la misma.

Al fondo, se encuentra el restaurante, un salón bastante cuadrado y poco íntimo en el que la decoración vuelve a sobresalir por la mezcla divertida de diferentes muebles de origen oriental. Mesas bastante amplias, cómodas pero demasiado juntas. Un problema importante, demasiado ruidoso.

La carta incluye una interesante mezcla de culturas, con platos japoneses, hindúes, mediterráneos, franceses e italianos. El menú es una especie de cocina de fusión entre las distintas culturas. En nuestra visita optamos por compartir varios primeros y un segundo cada uno. Entre los primeros nos gustó bastante el Variado de Sushi, la Tartaleta de Foie era bastante corriente y el Carpaccio de bacalao tampoco nos conquistó especialmente.

Entre los segundos, a pesar de que éramos una mesa amplia sólo probamos dos platos diferentes, uno que triunfó sobremanera, el Cabrito Asado con salsa de ostras y el otro, el Steak Tartar japonés en el que hubo más disparidad de criterios. Pero en general, las opiniones también fueron muy positivas.

Desde luego, la cocina es bastante mejor de lo que esperábamos a juzgar por el tipo de sitio que se trata.

La carta de vinos es bastante completa, con vinos de las principales denominaciones de nuestra geografía nacional además de varios interesantes extranjeros. Elegimos el Les Terrases de la Bodega del Priorat Álvaro Palacios, para conmemorar el nuevo premio que ha recibido este joven enólogo. No estuvo bien servido y las copas eran incorrectas. El vino me gusta bastante pero siempre he pensado que es un poco caro, algo bastante frecuente en todos los que provienen de esta Denominación de Origen. Color rojo picota, capa alta con ribete violáceo. En nariz, toques frutales, algo de madera, un poco amargo para mi gusto. En boca es muy rico y potente. Mejora con el tiempo durante la cena. Una pena que no tuviera una mejor puesta en escena.

Respecto al servicio, es lo peor del sitio. Nosotros no tuvimos una especial mala suerte con la responsable de nuestra mesa pero no eran auténticos profesionales. Gente joven, guapa y, muchas veces, con ganas de agradar, pero bastante flojo el nivel medio.

Lo que sí me gustó mucho es la zona para tomar copas después de cenar. No estaba demasiado agobiante a pesar de ser un sábado por la noche de un fin de semana especialmente agitado en Barcelona por la Fórmula 1. Tenían las principales marcas de destilados, incluso algunos menos frecuentes de encontrar en muchos sitios El ambiente era muy fashion. La zona de mesas bajas es algo más discreta y muy cómoda si se quiere algo más tranquilo.

Está permitido fumar en todo el local.

Lo mejor, sin ninguna duda, el ambiente y la decoración del sitio.

En cuanto al precio, la media está, aproximadamente, en unos 50/60 euros por persona.

Valoración – 8/10